Después de Chevron: El margen de deferencia en el Derecho Administrativo de Estados Unidos y el caso Loper Bright
Resumen
En el Derecho Administrativo de Estados Unidos, el margen de deferencia se había basado en el caso Chevron, de 1984. Según este precedente, las
cortes deben abstenerse de revisar la interpretación que las agencias hacen de
conceptos jurídicos ambiguos, siempre y cuando la interpretación sea permisible.
En el caso Loper Bright, de 2024, la Corte Suprema revocó el precedente Chevron,
al concluir que el uso de expresiones ambiguas no puede limitar el control judicial
sobre las agencias, pues ello viola las bases constitucionales de tal control. Sin
embargo, y de manera más bien tímida, la Corte reconoció que el Congreso puede
atribuir a las agencias competencias discrecionales, en cuyo control judicial las
cortes deben mantenerse fuera del espacio de políticas públicas. Una forma de interpretar este nuevo criterio es a través de la distinción entre conceptos jurídicos
indeterminados y la discrecionalidad administrativa, común en el Derecho Administrativo de Hispanoamérica. In United States Administrative Law, the margin of deference had been
based on the 1984 Chevron case. According to this precedent, courts should refrain from reviewing agencies' interpretations of ambiguous legal concepts as long
as the interpretation is permissible. In the 2024 Loper Bright case, the Supreme
Court overturned the Chevron precedent, concluding that the use of ambiguous expressions by the statute cannot limit judicial control over agencies, as it violates
the constitutional foundations of such control. However, in a somewhat timid manner, the Court acknowledged that Congress could grant discretionary powers to
agencies, in which judicial control the courts should stay out of the realm of public
policy. One way to interpret this new precedent is by distinguishing between indeterminate legal concepts and administrative discretion, common in Hispanic American Administrative Law.