Alternativa axiológica para el abordaje de las conductas disruptivas desde el enfoque de la orientación educativa

Abstract

Las conductas disruptivas en la educación son un fenómeno que afecta gravemente el ambiente escolar, siendo uno de los eventos más comunes donde el proceso de orientación debe apoyarse en nuevos enfoques. Este ensayo tiene como propósito presentar una visión particular de los posibles aportes de la intervención axiológica para el abordaje de las conductas disruptivas, de modo interpretativo. Con una perspectiva metodológica cualitativa y aplicando el método hermenéutico. Esto, como una opinión reflexiva en torno a los supuestos de la teoría de la aprehensión de valores de Lonergan (1972) respectivamente. Es así como, la intervención axiológica se transforma en una acción social, donde los valores éticos, morales, afectivos, entrelazados con las emociones y la enseñanza-aprendizaje, es decir, al aplicar la tolerancia, el respeto, responsabilidad u otros valores fundamentales que brinden al área educativa una integración y afectuosa convivencia, permitiendo en un futuro una estrecha unión mediante estrategias integradoras como ejes transversales, promueven la coexistencia sustentable mejorando la conciencia social. En resumen, el orientador pedagógico debe priorizar el acceso e intervención de las conductas disruptivas e investigar las fuentes de estas conductas, aunque eso signifique ir más allá de la enseñanza, ya que la pedagogía que esto representa, excede la realidad. Por ende, la valoración y la orientación emocional jueguen un papel adecuado, porque no se puede atacar la violencia con violencia, por lo que hay que actuar con confianza, respeto, entre otros.

Disruptive behaviors in education are a phenomenon that seriously affects the school environment, being one of the most common events where the guidance process must be supported by new approaches. The purpose of this essay is to present a particular view of the possible contributions of axiological intervention to address disruptive behaviors, in an interpretive way. With a qualitative methodological perspective and applying the hermeneutic method. This, as a reflective opinion about the assumptions of Lonergan’s value apprehension theory (1972), respectively. This is how the axiological intervention becomes a social action, where ethical, moral, affective values, intertwined with emotions and teaching-learning, that is, by applying tolerance, respect, responsibility or other fundamental values that provide the educational area with an integration and affectionate coexistence, allowing in the future a close union through integrative strategies as transversal axes, promoting sustainable coexistence by improving social awareness. In summary, the pedagogical counselor must prioritize the access and intervention of disruptive behaviors and investigate the sources of these behaviors, even though that means going beyond teaching, since the pedagogy that this represents exceeds reality. Therefore, emotional assessment and guidance play an appropriate role, because violence cannot be attacked with violence, so you have to approach act with confidence, respect, among others.