Insidencia de sepsis neonatal en la unidad de terapia intensiva del Instituto Autónomo Hospital Universitario de Los Andes

Abstract

Introducción: sepsis neonatal es una importante causa de mortalidad en recién nacidos a nivel mundial; nuestro país no escapa a esa situación. En países del Tercer Mundo la incidencia es alta por el incumplimiento de normas y estrategias preventivas. Objetivos: Determinar la incidencia de sepsis en la Unidad de Terapia Intensiva Neonatal del Instituto Autónomo Hospital Universitario de Los Andes. Métodos: se incluyeron a los neonatos ingresados en la UTIN entre 01 de Marzo al 30 de agosto del año 2017; fue un estudio observacional descriptivo prospectivo. Se realizó un muestreo no probabilístico, por conveniencia y se aplicó una ficha de recolección de datos. Los datos fueron analizados en el sistema SPSS 20.0. Resultados: de los 115 RN que ingresaron, se incluyeron 101. La incidencia de sepsis neonatal fue de 55,7 por cada 100 admisiones, el 87,8% de los casos de sepsis se presentaron luego de 72 horas de la admisión. Las manifestaciones más frecuentes de sepsis fueron las alteraciones en la cuenta de glóbulos blancos y plaquetas y las alteraciones de la frecuencia cardiaca y respiratoria. Se realizaron 54 cultivos; en 25 casos los cultivos fueron positivos. El microorganismo más frecuente fue Klebsiella pneumonie; las cepas exhibieron patrón de resistencia de BLEE. El foco de infección asociado a la sepsis más frecuente fue neumonía. El uso de catéter venoso central y umbilical y la administración de nutrición parenteral fueron condiciones asociadas a mayor riesgo de sepsis. La mortalidad en los pacientes con sepsis fue de 40,8%. Los pacientes con sepsis tuvieron mayor tiempo de hospitalización. Conclusiones: se determinó una alta incidencia de sepsis neonatal, permitiendo identificar factores de riesgo, fundamentalmente asociados a infecciones nosocomiales, donde las medidas de higiene son deficientes. Se recomienda educación continua sobre procedimientos de higiene, limitar el uso de nutrición parenteral y permanencia de catéteres intravasculares centrales por el tiempo mínimo posible, uso racional de antibioticoterapia y programas continuos de vigilancia epidemiológica, como estrategias para disminuir las infecciones neonatales y los costos de atención asociados.

Introduction: neonatal sepsis is an important cause of mortality in newborns worldwide; our country does not escape this situation. In third world countries, incidence is high due to non-compliance with preventive norms and strategies. Objectives: determine the incidence of sepsis in the Neonatal Intensive Care Unit of the Autonomous University Hospital of Los Andes. Methods: neonates admitted to the NICU were included between March 1 to August 30 of the year 2017; It was a prospective descriptive observational study. A non-probabilistic sampling was done, for convenience and a data collection form was applied. The data was analyzed in the SPSS 20.0 system. Results: of the 115 newborns admitted, 101 were included. The incidence of neonatal sepsis was 55.7 per 100 admissions, and 87.8% of sepsis cases occurred 72 hours after admission. The most frequent manifestations of sepsis were alterations in the white blood cell countt, platelets and alterations in heart and respiratory rate. 54 crops were grown; in 25 cases the cultures were positive. The most frequent microorganism was Klebsiella pneumonie; the strains exhibited BLEE resistance pattern. The most common source of infection associated with sepsis was pneumonia. The use of central and umbilical venous catheters and the administration of parenteral nutrition were associated with an increased risk of sepsis. Mortality in patients with sepsis was 40.8%. Patients with sepsis had a longer hospitalization time. Conclusions: a high incidence of neonatal sepsis was determined, allowing the identification of risk factors, mainly associated with nosocomial infections, where hygiene procedures are deficient. Continuous education on hygiene procedures are recommended, limiting the use of parenteral nutrition and permanence of central intravascular catheters for the minimum possible time, rational use of antibiotic therapy and continuous epidemiological surveillance programs, such as strategies to reduce neonatal infections and care costs associates.